La inflación más alta registrada en los últimos 20 años es de 7.68% en abril, según estadísticas de INEGI.Ello ha descontrolado a la economía de nuestro país y los empresarios aún no desarrollan estrategias y sistemas operativos para enfrentar la situación satisfactoriamente.
Esta situación resulta preocupante. Ante ello, la pregunta es ¿Cómo podemos mitigar los efectos de la inflación en nuestras empresas? Debemos comenzar por aceptar aprender a convivir con la inflación que permanecerá por tiempo indefinido con nosotros, no está claro cuándo podrá terminar.
Las grandes empresas particularmente de commodities o empresas dedicadas a la comercialización de materias primas han elevado considerablemente sus precios, en tanto las pequeñas y medianas empresas no lo pueden hacer de esta manera, por el propio modelo de negocios, aspectos administrativos y contratos con clientes y proveedores.
Para mitigar el impacto de la inflación, iniciaremos por incrementar nuestros precios y cuestionar todos los ingresos y gastos: ¿Utilizamos esto? Para qué? ¿Qué tan rentable es? ¿Mis productos tienen margen de contribución o cuales de ellos sería mejor retirarlos del mercado si no me generan utilidad? Recorta gastos innecesarios.
Aprende a negociar con la premisa de ganar – ganar, ya que las relaciones comerciales que hagas o dañes en este tiempo crítico permanecerán por años. Dale a tu empresa la oportunidad de generar nuevas alianzas y oportunidades de negocios.
El precio es importante, pero también puedes idear estrategias para negociar nuevas condiciones, nuevos productos, fechas de entrega y cobro que sirvan de impulso para lograr flujo positivo en tu empresa. Considerar que en este momento crítico es más probable que las personas y empresas estén dispuestas a asumir riesgos.
En el ámbito empresarial es recurrente escuchar: “Mis precios no han cambiado, pero mis costos han subido considerablemente, por lo que mis márgenes son más pequeños”. Es recomendable que las empresas se enfoquen en cuidar el efectivo, en un contexto impredecible y difícil.